jueves, 16 de abril de 2009

Póntelo, pónselo


Leo en El País la buena noticia de la reducción de muertos en las carreteras durante la semana de vacaciones primaverales. La parte mala es que muchas de las víctimas no llevaban el cinturón de seguridad. Concretamente, se lee:

"el 23% de las personas fallecidas y el 4% de los heridos graves no llevaba abrochado el cinturón. "La conclusión es: por favor, póngase el cinturón de seguridad", pidió el ministro."

No es que sea quisquilloso (vale, tal vez un poco sí), más bien quiero aprovechar la ocasión para señalar un error común en la presentación de este tipo de datos. La noticia no concluye bien lo que pretende decir. Si el 23% de los fallecidos no llevaba cinturón, esto implica que el 77% de los muertos sí lo llevaba. Así, con estos datos no podemos saber si llevar el cinturón es bueno o malo. Si, por ejemplo, la mitad de los viajeros no llevara cinturón y la otra mitad sí, sería más peligroso llevarlo que no llevarlo, puesto que los fallecidos sin cinturón son menos. En suma, necesitamos saber si la gente que no suele llevar cinturón es más o menos del 23%. Sólo si es menos podremos concluir que es mejor ponérselo.

El 4% de heridos graves es un dato más confuso todavía. Sólo si los individuos sin cinturón son menos del 4% podremos concluir que es más fácil salir gravemente herido si no se lleva este dispositivo de seguridad. Claro que puede pasar que esto es así, pero que la causa no es que salgan heridos leves o sin accidente, sino que no salen heridos graves porque engrosan la lista de muertos. Para evaluar bien esto necesitamos saber, del total de víctimas mortales y heridos graves, cuál es la proporción que no llevaban cinturón. Será un número intermedio entre el 23% y el 4%.  Pongamos que sea el 10% (tampoco nos dan este dato, así que me lo invento para hacer el argumento).

Ahora podemos ilustrar las posibles situaciones que se pueden dar.
  • Si la proporción de viajeros sin cinturón es, por ejemplo, el 30%, sería más peligroso llevarlo que no llevarlo.
  • Si la proporción de viajeros sin cinturón es del 15% es más probable resultar herido grave o muerto si se lleva el cinturón, pero es menos probable morir en la carretera.
  • Si la proporción de viajeros sin cinturón es del 7% es menos probable resultar herido grave o muerto si se lleva cinturón, pero es más probable morir en la carretera.
  • Si la proporción de viajeros sin cinturón es menor del 4%, es más probable resultar gravemente herido y también resultar muerto si se va sin cinturón.
Necesitamos saber el dato de cuánta gente va sin cinturón y también la proporción agregada de víctimas mortales o graves que no llevaban cinturón para saber en qué caso estamos y cuán grande es la diferencia entre llevarlo y no llevarlo.

4 comentarios:

  1. Te dejo un premio por la maravillosa labor:

    Jacqueline.

    http://misenlaceseducativos.blogspot.com/

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  2. Un cuentecillo de las trampas estadísticas que me hizo gracia en su momento fue el siguiente:

    La probabilidad de subirte en un avión en el que viaja un terrorista suicida con una bomba es baja, pero no imposible. Sin embargo, la probabilidad de subir a un avión en la que viajan dos terroristas con dos bombas es infinitesimal.
    ¿Qué hacer entonces para estar seguro de no morir en un avión a manos de terroristas suicidas? Llevar tú mismo una bomba en tu maleta.

    Un saludo.

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  3. Jacqueline:

    Muchas gracias. No sé si estaré a la altura en calidad, pero desde luego lo estoy en agradecimiento.

    Un saludo

    Una pregunta: ¿todos los seguidores de canarias sois familia?

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  4. Santiago:

    Sí, es un clásico.

    Te respondo con otro:

    La mayoría de los accidentes ocurren a menos de 20 km. de distancia del lugar de residencia. Por tanto lo mejor es alejarse esta distancia lo antes posible.

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